domingo, 11 de octubre de 2020

El lector de Julio Verne – Almudena Grandes

Vuelvo a los Episodios de una Guerra Interminable: Un pueblo de Jaén en el año 1948, en la Sierra Sur. El protagonista recuerda aquel año, el año que tan importante fue para su vida. Nino, un niño de 10 años, hijo de guardia civil que no parece que dará la talla para ingresar en el cuerpo. Su padre, preocupado por su futuro, piensa que aprender a escribir a máquina le abrirá muchas puertas. Una academia es impensable, así que el padre de Nino tendrá que recurrir a cierta clandestinidad. El futuro será el que sea, quizás incluso dará la talla, pero el presente le trae a Julio Verne, le trae La isla del tesoro, le trae los Episodios Nacionales, le trae una forma distinta de conocer la historia, le trae una forma distinta de vivir el presente. Nino, niño despierto, que tiene en Pepe el Portugués a un amigo. Un amigo que le descubre tanto, con el que comparte pesca y baños en el rio, con el que aprende del comportamiento humano, un amigo que, incluso, le cuenta la historia de su familia, la que conoce pero también algunos episodios que no conoce. Un amigo que le abrirá la mente a situaciones nuevas casi sin darse cuenta, situaciones en las que sobre él recaerá una gran responsabilidad, situaciones donde quizás tenga que tomar partido. Una historia que nos muestra aquellos años, los del trienio del terror, los de una guerra ya acabada oficialmente pero todavía presente en aquella Sierra Sur. Una guerra que mantiene el miedo, que mantiene las diferencias, supervivientes que fácilmente pueden dejar de serlo. Nino desde sus 10 años descubrirá las muchas caras que tiene una misma situación, las muchas caras que tenemos cada uno de nosotros.

La gente dice que en Andalucía siempre hace buen tiempo, pero en mi pueblo, en invierno, nos moríamos de frío. Antes que la nieve, y a traición, llegaba el hielo. Cuando los días todavía eran largos, cuando el sol del mediodía aún calentaba y bajábamos al río a jugar por las tardes, el aire se afilaba de pronto y se volvía más limpio, y luego viento, un viento tan cruel y delicado como si estuviera hecho de cristal, un cristal aéreo y transparente que bajaba silbando de la sierra sin levantar el polvo de las calles. Entonces, en la frontera de cualquier noche de octubre, noviembre con suerte, el viento nos alcanzaba antes de volver a casa, y sabíamos que lo bueno se había acabado.

De la misma autora en el blog: Inés y la alegría.

domingo, 27 de septiembre de 2020

La vida a veces – Carlos del Amor

Primer libro de Carlos del Amor, un libro de cuentos que nos trae su particular forma de ver el mundo, de hacer grande lo pequeño. Y con este libro iniciamos el curso del club de lectura Escuela de Mandarines. 25 historias donde se disfruta del peculiar hacer de este autor.


Inicia esta recopilación SIN IDEAS y las dificultades de un escritor ante la página en blanco, la página que habría que llenar con historias asombrosas, la vida de la que esperamos esas historias de película, la vida a veces asombrosa, siempre trascendente y, sin embargo, la vida a veces, en tan pocas ocasiones contada.

La memoria protagonista de varias de las historias que aquí nos trae Carlos del Amor, como en SIN RECUERDOS ¿es la que define lo que somos? ¿qué ocurre cuando la perdemos? ¿seguimos siendo nosotros?

Historias de una vida como en EL TRASTERO, aquello que dejamos pasar y que un día, afortunadamente, vuelve a nosotros. La vida de los nuestros que siempre había sido algo supuesto. AEROPUERTOS, esas llegadas a las que tan acostumbrados nos tiene Carlos del Amor, esas llegadas que esperamos que vuelvan a ser multitudinarias, que nos cuente tantas otras, sobre el papel o detrás de una cámara. LA FOTO que nos lleva a tanto que quedó en el olvido, instantes que una cámara pudo retener, instantes que se convierten en una vida. También la palabra protagonista frecuente, tanto como en la vida donde apenas somos conscientes del poder que tenemos con ella, de como nos condiciona el uso que le damos. MARTES, un día en la vida de los vecinos de un edificio, que hay detrás de la puerta de aquellos con los que compartimos un espacio, que ocurre en ese momento en el que te cruzas con tu vecino del 3º. Historias que quizás no sucedieron nunca, historias que quizás suceden cada día.

Y así hasta 25 relatos que no siempre nos dejarán una sonrisa en los labios, a menudo nos encogerán el corazón. La vida a veces.

Del mismo autor en el blor: El año sin verano

domingo, 13 de septiembre de 2020

A la sombra del granado – Tariq Ali


Tariq Ali publicaba en 1992, 500 años después de la toma de Granada, esta novela que nos lleva a los años posteriores a ese momento tan simbólico. Un momento de cambio, el fin de una etapa de 8 siglos que dibujaron esta ciudad. Una ciudad donde siguen conviviendo tantas culturas. Y nos encontramos ahora en otro momento donde todo está cambiando, leer A la sombra del Granado nos ayuda a entender esos sentimientos de pérdida, la nostalgia de tiempos pasados, el hacer frente el aceptar.

Esta novela se inicia con libros y manuscritos de las bibliotecas granadinas ardiendo bajo las órdenes de Cisneros. Los libros en la hoguera que tantas veces hemos visto como forma de terminar con lo más preciado de una cultura, con lo que define a una civilización.

… Hemos ganado. La de esta noche ha sido nuestra auténtica victoria.

Este será el desencadenante del fin de unos años donde parecía que la convivencia podría ser posible, unos años donde Isabel garantizaba que todos pudieran seguir en Granada. El tratado firmado establecía que serían respetadas las propiedades, religión, tradiciones y costumbres musulmanas. Sin embargo, no duró mucho esta situación y Tariq Ali nos muestra a Cisneros como responsable.

-En tiempos como éstos, ¿qué es más importante? ¿Sobrevivir del mejor modo posible o replantearnos los últimos quinientos años de nuestras vidas y actuar en consecuencia?

Tariq Ali se vale de una familia asentada en al-Hudayl, una aldea cercana, la que acompañaremos en los entresijos de las relaciones familiares. Una familia que mantiene la suficiente distancia del centro de poder, de Granada, y sin embargo no puede vivir aislada del desarrollo de los acontecimientos. Los miembros de una familia que viven, desde su experiencia, desde su situación, de forma distinta un futuro que existía hasta hacen tan poco.

-Cuando pienso en el futuro, ya no veo el intenso azul del cielo – confesó Umar-. No veo más que una densa niebla, una oscuridad primitiva que nos envuelve a todos….

Es difícil no encontrar paralelismos entre aquella época y el momento que vivimos en la actualidad. Es difícil no recorrer las calles de aquella Gharnata que tantas veces se ha reinventado o quizás aquella Gharnata que sigue siendo la misma.

sábado, 29 de agosto de 2020

La librería ambulante – Christopher Morley


Llevaba un tiempo en mi lista de pendientes, la recomendación de una amiga hizo que se convirtiera en una de mis lecturas de este verano. La librería ambulante es una historia entrañable que nos lleva a soñar. Enlaza un mundo donde el viaje y los libros son los protagonistas. El viaje que nos permite abrir nuestra mente a nuevos conocimientos, a otras formas de vida alejados de nuestras cuatro paredes, el viaje como una forma de conocer a otros. Y los libros siempre presentes, los libros y las historias que nos cuentan, como con ellos también viajamos, como nos llevan, y como nos traen lo que otros tienen que contarnos, como nos ayudarán en nuestro día, en nuestro trabajo, en nuestro ocio.

Roger Mifflin, un librero ambulante, quiere vender su negocio, ahora tiene tanto que contar de todos sus kilómetros recorridos en su carromato librería que desea volver a Brooklyn donde redactará sus memorias. Y llega a la granja McGill buscando a un famoso autor del que ha vendido tantos libros. Piensa, por sus escritos, que sería la persona ideal a la que vender su negocio, que sería el ideal para continuar con su legado. El es un librero que conoce el libro que necesita cada uno, un librero que es bienvenido allá donde va. A quien encuentra al llegar, sin embargo, es a Helen McGill, hermana del famoso autor. La que cada vez tiene más que hacer en la granja donde ambos viven desde que su hermano se dedica a la literatura. Y en unos pocos minutos decide que será ella la que compre el carromato y salga a los caminos a llevar la literatura tantos rincones de la América principios del siglo pasado. Y solo para evitar que lo haga su hermano.

Así empieza la historia de este libro con el que he disfrutado viajando en ese carromato, los libros y unos personajes a los que un viaje tranquilo les permite disfrutar de cada momento, dedicar a cada conversación el tiempo que precisa, llegar a conocer a los demás para lo que se necesita compartir tiempo. Tiempo que no falta en esta novela. Y aventuras, las aventuras que siempre te da un viaje, más aún este tan particular, y siempre te dan los libros.

La vida se llena de un sabor especial cuando uno anda rodando por los caminos.

 Y la editorial nos regala esta guía de lectura.

http://www.editorialperiferica.com/guia_lectura_la_libreria_ambulante.pdf

domingo, 16 de agosto de 2020

Justicia Uniforme– Donna Leon

No hay verano sin Donna Leon, sin Guido Brunetti. Visitamos, en esta ocasión, una academia militar donde un alumno aparece muerto, aparentemente se ha suicidado, es el hijo de un famoso médico de la ciudad que tuvo que dejar la política hace un tiempo de forma polémica.

Brunetti no dará nada por sentado, será una investigación tranquila donde pocos parece que quieran profundizar pero Guido Brunetti habla con los implicados, con los padres del muchacho, con los vecinos, envía a sus policías más jóvenes a preguntar a los alumnos de esta academia, al personal que allí trabaja, personas que parecen tener leyes distintas al resto de los habitantes de Venecia.

La señorita Electra traerá a manos de Brunetti la información en los archivos oficiales, las noticias en los periódicos, lo que la ciudad conoce. Y también hay que hablar, hablar de lo que pasó, de lo que pasó entonces pero no solo en ese pasado cercano, conocer a la familia, conocer a los compañeros, a los profesores, no descartar ningún detalle, es lo que nos va a ayudar a entender a los implicados., abrir la mente a otras interpretaciones. Y, sin embargo, un final que queda abierto y que deja que la justicia de la vida actúe de forma desigual para cada protagonista, igual que ocurre en la realidad de cada día.

Y, por supuesto, disfrutar de las lecturas en la vida de la familia Brunetti y de la cocina de Paola, uno de los mayores placeres de las novelas de Donna Leon.

De la misma autora en este blog:

domingo, 2 de agosto de 2020

Diario de una abuela de verano – Rosa Regás


Rosa Regás nos cuenta en este diario personal el campamento de verano que organiza cada julio con todos sus nietos. Una historia deliciosa donde una abuela atípica disfruta de sus nietos durante un mes cada año, un mes que ejerce de abuela a tiempo completo, un mes donde los hijos apenas aparecen. Un mes acompañados por tantos otros que también forman parte de la familia. Nos habla de temas logísticos, el número de nietos así lo requiere. Y, sobre todo, nos habla de temas personales, recuerdos y actualidad durante esos julios que llegan a confundirse entre ellos, tan distintos, tan parecidos. Nos habla de temas literarios, de las diferencias entre ficción y realidad, de sus hábitos de lectura, de escritura, de otros autores. Nos habla de esa masía catalana donde el verano se disfruta a tiempo completo. Unos veranos que son un gran legado para cada uno de sus nietos, esos veranos que comparten con primos y hermanos y que los ayudan a crecer y a la vez a seguir siendo niños.
Este diario nos habla de amor, nos habla de amistad, también de los amigos que ya no están, nos habla de la naturaleza, de la que tan difícil es llegar a disfrutar para un niño que vive en la ciudad, que tan fácil es en esta casa del Ampurdán, nos habla de política, la actualidad que no puede escapar de estas líneas que se escriben en la tranquilidad de la noche cuando todos duermen, nos habla del paso del tiempo, también de esa vejez que a menudo da miedo.
Y mientras seguimos caminando en silencio me emociono al pensar que mi regalo de cada verano durará más que yo misma y que en la profundidad de su memoria siempre habrá un rincón en el que el encanto de estas vacaciones repetidas año tras año formará un territorio inmarcesible de amor y complicidad. Y en esa memoria yo estaré con ellos aunque entonces no me sea dado disfrutarla porque mi turno ya habrá pasado, mi turno toca ahora, en el presente, no en el futuro.
¿Qué otra cosa puedo yo dejar a mis nietos?

También de esta autora en el blog: