domingo, 21 de junio de 2015

La hija del boticario - Charlotte Betts

Libro que llegó a mis manos como un regalo, por su título. Libro ambientado en el Londres del siglo XVII en plena epidemia de peste. Personajes y emociones que quizás necesitarían un poco más de desarrollo para un final predecible de una historia romántica pero que nos llevará a conocer un momento de la historia real Reino Unido.

La protagonista es la hija de un boticario que trabaja codo con codo con su padre viudo, el que le ha transmitido todos sus conocimientos. Y que cuando no están trabajando, leen, van al teatro, discuten sobre la actualidad… y así piensa que seguirá siendo su vida.
Un día su padre le comunica que quiere volver a casarse y ahí es cuando empezamos a ver las pocas opciones que tiene una mujer: al no poder vivir en la casa familiar y seguir trabajando con su padre, le queda el matrimonio o trabajar en alguna casa como interna. Poco importa todos los conocimientos que ha adquirido durante este tiempo, incluso en una situación dramática como la que vivía Londres en ese momento: una gran epidemia.
Así que vamos a acompañar a Susannah por su periplo para poder salir adelante según la época y el entorno en el que le ha tocado vivir y vamos a conocer cómo era la vida de una gran ciudad en una situación catastrófica que disminuyó el número de sus habitantes de forma tan importante. Vamos a ver como se vivían los periodos de cuarentena y cómo se vivía la muerte de tus familiares, de tus vecinos. Como se vivía la desconfianza al no saber como se propagaba la enfermedad. Y vamos a acompañar a Susannah también en otra situación tanto o más dramática: el gran incendio de Londres que duró 3 días y acabó con la antigua ciudad medieval, debido al fuerte viento y, posiblemente a una mala gestión del mismo. Eso sí, que tuvo la ventaja de acabar también con la gran epidemia.

En el gran almirez de piedra, el mismo que utilizaba ahora, había preparado mezclas extraordinariamente pegajosas de grasa de cerdo, albayalde y trementina como bálsamo para las quemaduras. Había aprendido a leer estudiando las palabras, en latín, pintadas en los tarros alineados contra las paredes y, más tarde, a escribir siguiendo la exquisita caligrafía de su padre en las etiquetas pegadas a las hileras de cajones de madera. 
…flotaba entonces el mismo hedor a azufre en el aire, mezclado con los acostumbrados aromas a agua de rosas y cera de abeja, regaliz y aceite de ajenjo, trementina y hierbas secas. 

sábado, 13 de junio de 2015

La amante de Bolzano – Sándor Márai

Libro que compartimos en el club de lectura Escuela de Mandarines. Fantástico, como siempre, este autor. ¡Qué bien escribe! Me han gustado mucho los interminables monólogos de sus personajes. ¡Y Venecia…!, aunque la historia no se desarrolla allí, se habla de ella con tanto entusiasmo... que gustaría volver una y mil veces.
Las expectativas que tenía eran muy altas, ya que otros libros suyos que he leído últimamente me han gustado mucho: especialmente La hermana y El último encuentro. Y quizás por estas expectativas tan altas, no es uno de los libros que recomendaría de Márai, la historia no he llegado a creérmela y para mi es fundamental, por muy increíble que sea lo que nos cuenten, poder pensar ¿y por qué no?. El personaje principal si que he llegado a creérmelo, personaje que Márai toma de la vida real, Casanova, y relata lo que pudo haber pasado tras huir de los Plomos en Venecia.
Una nota del autor, previa al inicio de la novela, indica que no se ha basado en las memorias de su personaje, sino que sólo ha tomado de ellas la fecha y las circunstancias de la fuga de la prisión de los Plomos de Venecia. Así pues, no se trata de una novela histórica, ni de una biografía novelada, sino de una interpretación del personaje.
Nos muestra un personaje distinto, no tan centrado en sus conquistas, imagen que fácilmente podemos tener de él, como en lo que ha significado su vida, en su faceta de escritor, en no disponer de nada, vivir al día y como conseguir recursos, el no poder volver a su patria.
He disfrutado mucho con la época, cómo nos la cuenta, la vida en la pensión, las fiestas, el vulgo, el transporte, la facilidad con la que se realizan los viajes, aún con las dificultades propias de la época. Aunque lo mejor de la novela, para mi ha sido el amor por la escritura que transmite su protagonista. Sin olvidar, el análisis, a lo largo de varias páginas de la novela, de la carta enviada por Francesca que es insuperable, como tan poco puede llegar a dar tanto juego.

No le silban, no ha fracasado, pero ese silencio mortal, esa muda indiferencia es más terrible que un fracaso.

Ahora empieza la edad madura del hombre, uno de sus momentos más sabios, como si fueran las cuatro de la tarde de un día de mediados de octubre.

Y luego está lo que nos dicen del libro, lo que yo no llegué a creerme.

Casanova, fugitivo de la justicia, decide recuperar a Francesca, la única mujer que ha amado.


Y del mismo autor en este blog: La hermana.

sábado, 6 de junio de 2015

El cielo ha vuelto - Clara Sánchez

Me cuenta Mª José que ha leído “El cielo ha vuelto” de Clara Sánchez, una autora que sólo conocía de verla en los programas sobre cine que dirigía Garci. Le gustaban sus opiniones y la sencillez con la que se explicaba, pero nunca había leído nada de ella.
Este libro me ha resultado atractivo porque, a pesar de lo previsible que parecía el final, llamaba la atención el ambiente en el que se desarrolla: el día a día de una modelo de pasarela, con sus posados, desfiles y viajes en avión. 
Contrasta la parafernalia ambiental de la superficialidad del mundo de la moda con el trasfondo del argumento, que aborda varios temas, el fundamental: las relaciones, de pareja, profesionales, de amistad... Me parece una pretensión de ensayo novelado sobre la dependencia emocional y el vampirismo afectivo que algunas personas sufren sin saberlo.
En este caso, la protagonista, Patricia, es advertida durante un vuelo por su compañera de asiento, Viviana, una absoluta desconocida dada a lo esotérico. Le dice que alguien de su entorno la acecha y quiere matarla. Ella olvida la advertencia hasta que empieza a tener accidentes que, por su frecuencia, dejan de parecerle fortuitos. Obsesionada con averiguar quién los provoca busca a Viviana, y se somete a su influencia, hasta que consigue saber lo que pasa. Final que se presenta como sorprendente, pero a mí me parecía bastante obvio, por las pistas que da la autora.
Creo que tiene un ritmo muy irregular: se explaya demasiado en la recreación del ambiente y en las relaciones secundarias, para despistar al lector, y resuelve la trama en pocas páginas, evitando profundizar en lo que yo creo es el tema de fondo: las relaciones humanas enfermizas entre vampiros y vampirizados.


Y yo no sé si apuntarlo en mi lista de pendientes o disfrutar solo con la reseña…