domingo, 13 de octubre de 2024

Nubosidad variable – Carmen Martín Gaite

 

Para el alma que ella dejó de guardia permanente, como una lucecita encendida, en mi casa, en mi cuerpo y en el nombre por el que me llamaba.

 

Una novela que pone de manifiesto el valor de la escritura como recurso terapéutico. Dos amigas del instituto que se encuentran años después, quizás en su cuarentena, la autora no nos lo revela. Un encuentro casual que trae a la memoria un pasado feliz, pero una amistad que se enfrió evitó que ambas conocieran su presente. Mariana, una psiquiatra con pacientes que no solo quedan tras las puertas de su consulta, Sofía, una mujer con un matrimonio que se resquebraja.

Por favor, Sofía, sigue por donde sea y hablando de lo que sea, porque a todo lo que tocas le sacas jugo, lo más sórdido y rutinario lo conviertes en literatura. Echas sobre la mesa un dos de espadas y resulta que era el rey de oros. No tiene derecho a malversar ese don.

Y ahí comienza una relación epistolar entre ambas, esas cartas que Mariana escribe y que no llega a enviar, esas cartas que escribe desde Puerto Real, desde ese lugar donde ha llegado huyendo, huyendo no se sabe bien de qué, no sabe bien de qué, huyendo de su vida, quizás, esas cartas que la ayudan a recolocar en su sitio una vida, esa interlocutora, Sofía, que conoce tanto de aquella adolescente que fue, de esa adolescencia que tanto nos condiciona.

Pensaba con nostalgia en lo fácil que me resultaba escribirte tiempo atrás, cuando no había que hacer un “resumen de lo publicado”, cuando bastaba con simples alusiones, con echar mano de un lenguaje común que reflejaba gustos, bromas, y emociones comunes.

Y Sofía, que rellena cuadernos para Mariana, ella que quería ser escritora, ella que tiene una vida acomodada, ella que inició esta vida por un embarazo no deseado, esos hijos que ya no están en casa, ese marido del que no llegó a enamorarse, esa noche que quiso acompañarlo a aquella exposición.

Tantas palabras, cuando el interlocutor es el adecuado, tantas páginas que quizás no lleguen a su destinatario, tantas páginas que han curado corazones locos.

Dos vidas, la de Mariana y la de Sofía, que vamos a conocer a la vez que ellas mismas, ese tiempo necesario para contar la propia vida, para entender, para perdonar. El camino que ambas necesitaban recorrer para volver a empezar.

Y, sin embargo, a pesar de tantas palabras, puede que la vida no tenga cura:

-Se lo cuento –me dijo un día- para que usted lo escriba, porque así no lo desperdicio y un poco para desahogarme, por eso hablo con usted, que no se escandaliza de nada, como es natural, y me resulta cómodo. Pero no para que me cure, eso ni por las entretelas del cerebro se me pasa, porque la vida, doctora, no tiene cura.

Lean a Carmen Martín Gaite, escriban.

domingo, 29 de septiembre de 2024

Novela de ajedrez-Stefan Zweig

 

Una novela que merece una segunda y una tercera lectura. Esta novela ha vuelto a mis manos después de 10 años de mi primera lectura. Un día me llamó la atención en una librería y vino conmigo a casa y, mucho mejor, justo después de esta segunda lectura, fue a parar a manos de otra lectora y siguió viajando. ¡Qué mejor vida para un libro! Un libro que hace leer, ¡por fin!, a un autor eternamente pendiente.

En mi caso, Zweig es un autor que visito a menudo, no recuerdo como lo conocí. Y, ahora que he decidido jugar al ajedrez, quise volver a leer esta novela corta que tanto me gustó en esa primera ocasión.  Quería descubrir si conocer un poco más el mundo del ajedrez iba a mejorar la lectura. Diría que no, nada como la intriga de no conocer el final, no es necesario saber de ajedrez para disfrutarla. Si que he saboreado más algunas de las situaciones que nos cuenta Stefan Zweig, esas partidas conjuntas, esas partidas aprendidas de memoria que tanta información dan, no en el mundo de ayer, como otro de los libros de Zweig, sino el mundo de hoy, tenemos muchas herramientas para analizar las partidas pero ¿qué haríamos sin nuestra memoria? No había olvidado la capacidad del ser humano para hacer daño a sus semejantes, el daño físico y, sobre todo, el daño psicológico, tan fácil de ocultar en tantas ocasiones: ficción aquí, pero tantas veces realidad.

Y hablando justo ayer de ajedrez, con un ya amigo, llega también Zweig y tantas de las ediciones de esta novela. 

Fantástica lectura una vez más.

De este mismo autor en el blog:

 

domingo, 1 de septiembre de 2024

El libro de las ilusiones – Paul Auster

 

Cuando se publique este libro, querido lector, podrá tener la seguridad de que su autor lleva mucho tiempo muerto.

Ficción en su momento, real ahora con solo cambiar una palabra.

Paul Auster inicia esta novela presentándonos a alguien que quizás lleve muerto muchos años, un actor cómico de cine mudo desaparecido cuando llegaba el sonoro. Y una nota:

Querido profesor Zimmer, decía la nota. Hector ha leído su libro y le gustaría conocerlo. ¿Le apetecería venir a visitarnos? Atentamente, Frieda Spelling (Sra. de Hector Mann).

Y pronto sabremos como David Zimmer, un escritor y profesor de literatura de Vermont, es autor de un libro sobre la obra de Héctor Mann, este actor de comedias de cine mudo desaparecido. Auster lleva a su protagonista a sobrevivir a una de las mayores tragedias que una persona puede vivir, a la muerte de su familia en un accidente de avión al que él no subió, y una de estas comedias es lo primero que le hace reír después de meses de existencia sin sentido, es la semilla que inicia la escritura de este libro tras visionar varias de estas películas, películas que se encuentran en distintas cinematecas de Estados Unidos y de Europa, un trabajo de investigación que permite a David tener un sentido en este momento vital.

Esa carta que llega, que David piensa que es una broma de mal gusto para la que pide confirmación, que olvida, que llega una vez más, y otra hasta que finalmente es Alma la que se presenta en casa de David. Alma la mensajera de Héctor Mann y de Frieda Spelling, Alma la que consigue que David monte en un avión para atravesar EEUU. Alma Grund, la que con métodos poco ortodoxos convence a David para visitar a este actor cómico desaparecido. Pero poco puedo contar que consiga trasmitir como Auster nos lleva por las páginas de esta novela atrapándonos en su lectura, por la vida de este actor, de este profesor universitario. Como los acontecimientos transcurren lenta o aceleran vertiginosamente, como está presente el azar, como hace verosímil lo increíble, como en una vida pueden transcurrir tantas vidas.

Fantástico Auster, como siempre, en el verano de Escuela de Mandarines.

 

Otros libros del autor en el blog:

Brooklyn Follies

El Cuaderno Rojo

Tombuctú

Un hombre en la oscuridad

Invisible

sábado, 31 de agosto de 2024

Nadie vale más que otro. Cuatro asuntos de Bevilacqua – Lorenzo Silva


Cuatro novelas cortas donde la investigación discurre de una forma más ágil que en las novelas de la serie, cuatro asuntos cotidianos que nos llevan a conocer un poco más la naturaleza humana. Un libro que celebra los 10 años de vida de Bevilacqua y Chamorro.

En el trabajo policial, como en la vida, sirve mucho más lo que has visto que lo que eres capaz de ver

El primero de ellos da nombre al libro Nadie vale más que otro, sin embargo, no está titulado así, sino como Un asunto rutinario, un asunto que no es de la categoría de esta pareja de guardias civiles, la falta de personal disponible lleva a Vila y Chamorro a investigar un asunto menor donde parece haber un ajuste de cuentas relacionado con drogas. Un asunto que se habría resuelto rápidamente, ellos no se quedan en las apariencias, profundizan más sorprendiendo hasta a su viuda.

-Para nosotros nadie vale más que otro, señora-dije, sin embargo-. Nadie merece que lo maten y no haya quien se preocupe.

Un asunto familiar. Un asunto difícil, la muerte de una niña que sufre una agresión sexual, un pálpito, el de una madre, y la resolución del caso donde ayuda la falta de profesionalidad del agresor, donde ayuda la profesionalidad de los guardias civiles. La falta de premeditación, un momento de locura.

Un asunto conyugal. Quizás un asesinato por celos tras una infidelidad, un sospechoso atípico en sus respuestas, un marido que los vecinos dan por culpable. Apariencias una vez más. Confiar en ellas o no hacerlo.

El brigada Aranda, al mando de nuestro parco pero aguerrido destacamento en el lugar, nos informó de que el sospechoso dormía, después de una madrugada intensa que se había prolongado hasta las seis.

Un asunto vecinal: En esta ocasión la pareja de guardias civiles viajan a Lorca, Murcia, por el asesinato de un inmigrante. Un asunto que queda en el barrio, es allí donde se van a realizar las pesquisas. Historias que llevan a tantos a dejar su país su familia y empezar una nueva vida en un lugar remoto. Prejuicios y apariencias que confunden. Historias cotidianas donde la nacionalidad puede ser la chispa que hace saltar.

 

…, el mes de agosto, en el que se deja sentir un cierto abandono del mundo corriente: cuando las ciudades y las oficinas están vacías, los periódicos son escuetos….y la gente parece abdicar, cuando no renegar, de su vida cotidiana.

 

 

Un apunte del autor

El título, Nadie vale más que otro, está tomado del primero de los relatos, y es una afirmación que me parece representativa del talante y la filosofía vital del sargento. Los cuatro relatos, aun escritos en momentos diversos, entre 2001 y 2004 (uno en cada año de los que abarca ese periodo), tienen un doble hilo común: son todos ellos historias estivales, y los casos de que se trata no son esos crímenes recalcitrantes y a veces algo retorcidos que se suelen ingeniar para las novelas, sino homicidios cotidianos, hasta vulgares, de los muchos que los investigadores resuelven con relativa rapidez. Hay quien cree que sólo puede hacerse literatura desde la fantasía y la evasión de la realidad, ya sea reinventando el pasado a conveniencia u otorgándole al presente una faz anómala y forzadamente misteriosa. Pero Bevilacqua y quien le escribe creemos que el misterio que verdaderamente nos concierne es el de las cosas cotidianas, incluso el de las gentes y los asuntos vulgares y rutinarios, que sólo lo son, en el fondo, cuando vulgar y rutinario es el ojo que los mira.

...

https://www.lorenzo-silva.com/libros/nadie-vale-mas-que-otro/

 

Del mismo autor en este blog:

El blog del inquisidor.

El lejano país de los estanques.

Música para feos.

El alquimista impaciente.

La niebla y la doncella.

La reina sin espejo.