Un libro que llegó a
mis manos, una amiga me lo prestó por los buenos comentarios recibidos, después
de haber visto bastantes entradas sobre él en los distintos blogs que sigo aunque
fue la entrada de Déjame
leer en paz sobre otro título de la trilogía la que me animó con él.
Un superventas
clásico. Una historia que engancha, no puedo negarlo. Al principio pensé que
iba a ser una historia similar a Intocable
pero muy pronto me di cuenta de que los protagonistas tenían un carácter
totalmente distinto. Si que tenemos un tetrapléjico y su cuidadora, una
historia bastante esperable, alguien que ha tenido un accidente que lo ha
dejado sin movilidad, una persona con una vida anterior de anuncio, una cuidadora con una vida bastante anodina que llega
de rebote a este trabajo, nunca antes había trabajado como cuidadora, después
de tener que dejar su trabajo como camarera.
La historia
transcurre en cierta forma como se espera, vemos la evolución de cada uno de
los dos personajes, él ensimismado en sí mismo, muy afectado por la situación a
la que le ha llevado su accidente y con un único objetivo en su vida actual y
ella, sin saber muy bien como llevar esta situación: un trabajo muy bien pagado
pero difícil a la vez, o sencillo, solo estar allí, estar pendiente ¿por qué la
han contratado? Él cambiará, ella cambiará. Nuevas oportunidades, nuevos puntos
de vista.
Y otros personajes
también están entre las páginas de este libro. Secundarios que bien se hubieran
merecido un poco más de protagonismo, pero tienen su papel y lo cumplen sin
pena ni gloria, más de uno demasiado desdibujado.
Podríamos esperar un
final estándar para un superventas, sin embargo, los siguientes títulos de la
trilogía nos dan una pista, las ventajas o los inconvenientes de haber tardado
un tiempo en leer este libro.
Una historia que
apuesta por la calidad de vida, por vidas de
anuncio ¿Un reflejo de una realidad potenciada por las redes sociales? ¿y
qué ocurre cuando no es así? ¿Tenemos los recursos?
Una historia que se
lee muy bien, que genera muchos sentimientos pero que me deja un regusto amargo
por los valores que transmite, valores tan presentes hoy en día.