Releo esta novela de Javier Marías de la que apenas tenía un recuerdo: el de haber disfrutado con su lectura, disfruto con todas las lecturas de este autor. El primer párrafo es llamativo, hace que llegues a la novela con ganas de saber todo lo que vendrá después, y después te encuentras una historia sorprendente contada por María, toda la historia la conocemos desde su punto de vista, desde sus reflexiones, desde aquello que a ella le cuentan, desde sus deducciones. Y esto es también lo que llama la atención de esta novela, el que profundice tanto en una situación personal sin que apenas avance el tiempo, contada quizás en un tiempo real, y, aún así, tenerte enganchada queriendo saber que ha sido, que será de estos personajes que nos presenta la historia. Pocos personajes, alguno real como Francisco Rico, son los que nos llevan por esta historia que por inverosímil podría hasta estar basada en un hecho real.
Años coincidiendo en una cafetería a la hora del desayuno hace que dos personas lleguen a hablar un día tras un hecho traumático, que esas dos personas coincidan con un tercero, amigo de una de ellas, que dos de ellos lleguen a ser amantes, que una de ella llegue a conocer aquello que debería haber seguido siendo desconocido, que hay un tiempo para que las personas estén en la vida de otras. Una novela que nos habla de aquello que pensamos, de como interpretamos lo que nos pasa, lo que queremos que nos pase, lo que nos dicen aquellos que acaban de llegar a nuestra vida, como, a veces, es más fácil hablar con estos, como interpretamos lo que les pasa a los demás, como pensamos la forma en la que lo viviríamos nosotros. Una novela que nos habla tranquilamente de sentimientos, de reflexiones, de pensamientos, de ser espectadores de la vida de los demás, mientras la nuestra también sigue.
La última vez que vi a Miguel Desvern o Deverne fue también la última que lo vio su mujer, Luisa, lo cual no dejó de ser extraño y quizá injusto, ya que ella era eso, su mujer, y yo era en cambio una desconocida y jamás había cruzado con él una palabra.
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