En el centenario de la
publicación de La Metamorfosis, una
biografía intimista de este autor de textos tan característicos: pocos pueden
decir que han dado lugar a su propio adjetivo.
Una pequeña obra, por su tamaño,
bellamente ilustrada, que nos cuenta detalles de la vida de este autor, como
los lugares por los que discurría su vida, el despacho donde trabajaba, de
aquel tío que vivía en Madrid o las numerosas cartas que podía escribir y
enviar.
Al
cementerio judío de Olsany acudió un día una muchacha, Nelly, a quien una vez,
siendo niña, el joven K. le había escrito una carta. Y lloraba allí sola,
desconsolada, porque la había perdido; sabía que ya nadie le escribiría otra
igual, y empezaba a olvidar lo que decía.