domingo, 15 de enero de 2017

Cartas a una extraña – Mercedes Pinto Maldonado



De Mercedes había leído La última vuelta del scaife, un libro que me encantó, comentaba por aquel entonces que es un libro que deja huella, de aquellos en los que después de terminar su lectura los personajes siguieron conmigo durante muchos días, todavía me acuerdo de ellos en ocasiones. Después leí El escritor desahuciado, una novela por entregas con las que la autora nos obsequiaba cada domingo, y cuando dejó de llegar también la eché de menos.
Y en las estanterías de casa me esperaba Cartas a una extraña desde hace unos meses. Tenía muchas ganas de volver con las historias de Mercedes.

Enseguida me hice amiga de Berta, una chef londinense cuya madre acaba de morir y tiene que volver a Madrid, a su tierra, al lugar del que se fue hace 15 años y al que no había regresado, desde entonces. Historias del pasado que regresan, un pasado difícil que creía enterrado en lo más profundo de la memoria. Primeros capítulos que se viven con cierta angustia, la propia angustia de Berta cuando se remueve su pasado y van surgiendo tantos interrogantes.
En la revisión de ese pasado, reflejado en los rincones de la casa familiar, llega a un cajón, un cajón lleno de cartas sin abrir que traerán nuevas incógnitas a ese pasado que quería olvidar, a un pasado desconocido que quizás cambie toda su vida.
No puedo resistirme al mundo que se adivina a través de cualquier carta, así que cualquier novela que las tenga entre sus protagonistas tiene muchos puntos ganados conmigo. Y esta no iba a ser menos.
Sin embargo, como a mitad de la novela van surgiendo personajes, historias paralelas, acción… que hacen que la novela ya no parezca verosímil. Seguí leyendo pensando que habría algo después que hiciera que toda la historia encajara, me ha ocurrido en alguna que otra ocasión. Información que no tenemos como lector y que tampoco tiene la protagonista, pero que ahí está. Información que aparecerá en las páginas de la novela en el momento oportuno. En este caso, ¿dónde mejor que en una carta? En esa última carta que tanto se hace esperar, por ejemplo.
Yo he leído la historia en papel, sé que la novela tiene una edición con algunos cambios sobre la historia, pero no sé si es la mía y quizás esos detalles que yo echo de menos en la historia ya estén ahí.
Una bonita historia de intriga, con la que he disfrutado durante muchas de sus páginas, pero que no puedo decir que sea una historia redonda, al menos para mí.

De la misma autora en este blog:
 

4 comentarios:

  1. A mi me gustó mucho. Yo creo que las cosas que has echado en falta podrías encontrarlas en la siguiente novela, Mensajes desde el lago
    Besos

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    1. Pues entonces habrá que comoletarlo con los Mensajes. Muchas gracias. Un abrazo.

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  2. hola y feliz año! no lo leimos y ya corre a la agenda del nuevo año, nos gusta mucho lo que escribes.saludosbuhos!

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    1. Muchas gracias y feliz año también para vosotros. Un abrazo.

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